Foto: enCancha.com
Ferran Andrés I @ferranandres
Sin Dubljevic, Sato ni por supuesto Sam Van Rossom, con
Hamilton y San Emeterio tocados y con Trias como baja de última hora. Con una
rotación de 9 jugadores compareció Valencia Basket en el Fontes do Sar, un buen
escenario para ganar ante un rival a la deriva pero que estas alturas de
campeonato ya no se sabe en qué pista te pueden dar calabazas. No fue un
problema para Valencia Basket que sumó su vigesimosegunda victoria en la liga,
aguanta el tirón del Barça y aún se benefició de la derrota del Laboral Kutxa,
que lo aleja a cuatro victorias.
Los ‘taronja’ volvieron a asentarse en un gran arranque
(12-20 al final del primer período) para calmar el ímpetu local y dejarse
llevar por la consistencia de Luke Sikma que hizo de todo, como siempre, y
bien, como casi siempre, volviendo a demostrar que no necesita grandes acciones
para ser un jugador imprescindible. 6 puntos, 11 rebotes y 4 asistencias.
Todoterreno. A él se le fueron sumando el eléctrico Diot, y más tarde un
Hamilton que lejos de extravagancias triplistas hizo lo que mejor sabe hacer,
jugar cerca del aro. Cuando Santiago encontró el camino al aro en los últimos
minutos del tercer cuarto infundiendo una pizca de emoción al duelo (52-59,m.27)
John Shurna hizo su estelar aparición desde el 6,75 para que la victoria volara
Ryanair mediante a Valencia. Desde la derecha, la izquierda o la frontal los
triples surcaron directos el cielo de un desesperado Fontes Do Sar al aro
naranja. Este chico no tiene una muñeca sino un fusil y el equipo del coach
Martínez volvió a ganar con pocos jugadores, dejando atrás la tara de Estudiantes
en una victoria que sirve sobretodo para levantar la moral de la tropa a medida
que se consumen las semanas y se acercan los PlayOff, dónde veremos si una
rotación sin Van Rossom y esperemos que ninguno más es suficiente para asaltar
el cielo del título liguero tras descartar reforzarse.
Ah, y una victoria que sirve
para certificar matemáticamente una obviedad: los ‘taronja’ estarán por décima
edición consecutiva en las series por el título. Un bonito logro pero lo importante
empieza a finales de mayo, todo lo que no sea centrarse en intentar llegar de
la mejor forma física a ese momento importa poco. Mientras tanto Valencia
Basket sigue superando mil y un obstáculos.
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